Chichen Itza, una de las 7 maravillas del mundo.

Después de nuestra visita a la zona arqueológica de Ek Balam (pincha para ver el post), el guía local, Rafa, nos llevó hasta la zona arqueológica más importante de la zona, Chichen Itzá.

Nos costó 1h llegar, pues hay 70km entre una zona y otra. 

El precio de la entrada fueron 240 pesos (unos 14€) por persona pero además cogimos un guía del lugar al que se le paga aparte y como éramos un grupo de 10 personas lo pagamos entre todos y salió por muy poco. Me consta que el precio de entrada se ha duplicado y ronda los 30€ (datos de 2019). Los extranjeros pagamos una cantidad mucho más elevada que los locales, ya que el gobierno impone una tasa o impuesto al turista.

Chichen Itzá es lo que todos queremos ver cuando llegamos a Riviera Maya...y una vez que lo has visto en persona es cuando entiendes el porqué de su nombramiento como una de las 7 Maravillas del Mundo. Es realmente impresionante.

Esta antigua ciudad maya fue la más poderosa de la península de Yucatán. En 1988 fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y en 2007 fue declarada Maravilla del Mundo.
Según nos contó un guía local, la ciudad llegó a abarcar 25km cuadrados y llegaron a vivir en ella cerca de 100.000 personas en palapas de techo de palma.
El nombre de la ciudad significa “la boca o entrada al pozo de los itzáes”, haciendo referencia a los pozos o cenotes que abastecían de agua al lugar.

El edificio más importante de Chichén Itzá es el Templo de Kukulcán, representación maya del dios Quetzalcóatl. Se le conoce por “El Castillo”; hace 24m de alto y la plataforma sobre la que está hace 55.5m de ancho. En ella hay 4 escaleras que representan los puntos 4 cardinales, y cuyo número de peldaños totales coincide con los 365 días del año.
La pirámide tiene 18 terrazas, que simbolizan los 18 meses del calendario maya; debajo, en su interior, hay 52 tableros que representan los años de cada ciclo sagrado.

En los equinoccios de primavera y de otoño ocurre un hecho mágico en la escalera norte, los escalones proyectan un juego de luces y sombras que dibujan la imagen del cuerpo de la serpiente dios descendiendo literalmente a tierra, (bajada de Kukulcán), simbolizando el mandato de acudir a las labores agrícolas para la siembra de la milpa ante la llegada de la estación de lluvias.

(la bajada de kukulcan)

Hace unos años dejaban subir a lo alto de la pirámide, pero tras varios accidentes decidieron prohibirlo. Mis padres si que llegaron a subir, nosotros nos quedamos con las ganas.

El Cenote Sagrado es un pozo natural al que se le atribuían poderes por ser una de las principales entradas al inframundo y el hogar de varios dioses, es de forma circular, tiene 60m de diámetro y 15m de profundidad. Era el centro de las actividades religiosas, el pueblo maya acudía en peregrinación para ofrendar al dios de la lluvia con objetos de oro, jade, cobre, tela y cestería, además de hacer también sacrificios humanos; el guía nos contó que se arrojaban desde niños a ancianos y a mujeres vírgenes como tributo a los dioses.
En esta zona se encuentran edificios de arquitectura maya típica, como los templos de los Cuatro Dinteles, de los Tres Dinteles y del Dintel.

El Complejo de las Monjas era un palacio, con pequeñas habitaciones que combinan el estilo Puuc y el Maya Tolteca. La iglesia es un pequeño edificio con una decoración llena de calados y las esculturas de los bacabs, los 4 animales que en la mitología maya sustentaban el cielo desde los cuatro puntos cardinales, representados como un armadillo, un caracol, una tortuga y un cangrejo.

El conjunto del Caracol consta de tres partes: la Torre, el edificio de planta circular, y dos terrazas rectangulares desde las que se eleva la estructura redonda, con una pequeña escalera interna en espiral. Este edificio hacía la función de observatorio astronómico.

El Osario o Tumba del Gran Sacerdote es una pirámide similar al Templo de Kukulcan pero mucho más pequeña, que tiene un friso con relieves mitológicos decorado con la efigie del dios Chaacy y con 2 serpientes emplumadas en sus escaleras.

El Templo de los Guerreros está situado sobre un edificio en forma de pirámide, su nombre es debido a las decoraciones de sus pilares que muestran guerreros sujetando a sus prisioneros. Nos llamará la atención la imagen del Chacmool que custodia la entrada en posición sentada mirándonos, con las piernas dobladas y un cuenco de piedra sobre el regazo.

El grupo de las Mil Columnas es una construcción con muchas columnas o pilares que contienen escenas de guerreros y sacerdotes. Servían para sostener una bóveda de la que no hay restos.

Cinco estructuras componen el gran Juego de Pelota: el Juego de Pelota propiamente dicho, el Templo del Hombre Barbado, la Tribuna Meridional, el Templo de los Tigres y el Anexo oriental de este edificio. Está compuesto por 2 muros elevados y paralelos en cuyo centro se encuentran los 2 anillos de piedra, originales, por donde tenía que pasar la pelota.

El Templo de los Jaguares se localiza en el muro este del juego de pelota, en su partes posterior está una cámara esculpida con representaciones de guerreros, sacerdotes, animales y plantas acuáticas.

También hay una construcción que incluye calaveras y cráneos empalados, el Tzompantli o plataforma de los cráneos era una típica práctica en esta cultura. Los “elegidos” para estar en las paredes eran los cautivos que se sacrificaban para honrar a los dioses.

Una curiosidad que nos contó el guía que nos mostró la zona arqueológica es que en un lateral de la pirámide principal o Castillo , cuando alguien da una palmada en frente de una de las escaleras, el sonido se propaga y rebota formando un eco distorsionado, que simula ser el canto de un Quetzal. Por lo visto este efecto sonoro fue descubierto por casualidad por los guías del lugar. Nosotros lo pusimos en práctica y es realmente curioso ver cómo el simple hecho de dar una palmada en un lugar concreto se transforma en el canto de un ave; súper curioso.

Tras la visita de Chichen Itzá, nos fuimos a comer. Rafa nos llevó a Pisté en el municipio de Tinúm, y después visitamos el Cenote Ik kil, y Valladolid, pero eso te lo cuento en otro post.