Ek Balam el último yacimiento arqueológico descubierto en Yucatán

Dentro de nuestro viaje por Rivera Maya hicimos varias excursiones por la zona de la mano de un guía nativo que contratamos de manera particular, y creo que fue todo un acierto, porque este lugar es bastante desconocido y de no haber sido por él, quizás no lo hubiésemos visitado.

Rafa, que así se llamaba el guía, nos dijo que era un lugar especial y poco conocido, que no requería de guía pues el recorrido es corto y hay carteles que lo explican todo, y que podíamos campar a nuestras anchas por la zona arqueológica. También comentó que quizás el precio es algo elevado, la entrada nos costó 200 pesos por persona, que son como unos 12€ y también se podía contratar el servicio de un guía de la zona arqueológica que guiase la visita al precio de unos 30€, pero que merece la pena pagarlo.



No os puedo indicar cómo llegar a la zona porque Rafa alquiló una furgoneta (Van) que él mismo conducía y nosotros nos sentábamos en la parte trasera y con tanta gente no estábamos pendientes del camino. Éramos un grupo de 10 personas más el guía. De todas formas sí que pudimos observar que había carteles indicando como llegar a la zona arqueológica mucho antes de llegar. Os dejo un mapa para que os situéis.

Ek Balam significa "jaguar oscuro" en la lengua yucateca. Es un asentamiento maya en pleno corazón de la selva del Yucatán. Ha sido el último yacimiento arqueológico descubierto en la zona y se encuentra a unos 30km de la ciudad de Valladolid.

Fué la capital de un antiguo reino conocido como Talol.
Tiene una extensión de 12,5km de diámetro y está dentro de un área amurallada que contiene más de 40 edificios y una pirámide central.

El edificio más significativo de la plaza norte y de todo el conjunto es la Acrópolis (la pirámide). Desde lo alto de la misma hay unas  magníficas vistas de la selva, del Palacio Oval, del juego de pelota, de las pirámides gemelas y del bello arco de entrada a la ciudad.
A ambos lados de la escalera hay dos serpientes jeroglíficas junto al emblema del reino de Talol y de sus gobernantes.

En su parte alta también se puede ver la tumba del rey "Ukit Kan Le’k Tok" construida en el interior de un bonito mausoleo en el que se encontraron más de 7.000 ofrendas.
Este gobernante dedicó su reinado a la construcción y decoración de los edificios más importantes del lugar.

Y una de las cosas que mas nos gustaron del Acrópolis fueron los murales tallados en piedra de la fachada del mausoleo. Al mural se le dio la forma del rostro del monstruo de la tierra, que representa la entrada al inframundo; la abertura de la puerta de entrada hace a la vez de boca abierta del monstruo, y si nos fijamos en la parte inferior, se asemeja a una boca llena de dientes. En la parte superior de lo que sería la mandíbula hay tallados varios personajes, alguno con alas y vestido como si fuese a jugar a la pelota. Otras figuras como serpientes, máscaras con plumas o rayos, varios personajes sentados y de pie, un personaje sin cabeza y otro personaje central que podría ser una representación del gobernador Ukit Kan Le’k Tok.

Otro edificio destacable es el arco abovedado, que desde según que ángulo, tiene forma de cruz y se piensa que quizás pasar bajo este arco era un acto sagrado de purificación, al pasar de un lado profano a uno sagrado.

Destacable también es la plaza del juego de pelota, que es uno de los rituales religiosos más importantes de la cultura mesoamericana. En el libro sagrado Maya se describe un juego de pelota donde los gemelos divinos se enfrentan y vencen a los señores del inframundo.
Dos equipos de 2 a 5 jugadores cada uno, debían meter una pequeña pelota por un anillo de piedra, utilizando para ello las caderas o los codos. El juego contenía aspectos rituales incluidos los sacrificios humanos.

En la plaza sur hay un par de pequeñas pirámides que se denominan Gemelas porque eran idénticas aunque una de ellas está bastante dañada.

El Palacio Oval es otro de los edificios destables, y tal como dice su nombre, esta formado por piezas ovales y se cree que en él vivía gente importante de la ciudad o que se utilizaba como altar. Frente al palacio hay una plataforma con unos dibujos y unos textos grabados que hacen mención al año en que se construyó y el fundador de alguna importante dinastía.

Este lugar nos gustó mucho, aunque no es tan impresionante como Chichen Itzá por ejemplo, pero al ser menos conocido no haces colas, puedes hacerte fotos sin multitudes, tomarte tu tiempo y caminar tranquilo sin vendedores que molesten.
El horario es de 8:00 a 17:00h todos los días de la semana.


Consejos

Ir lo más pronto que podáis por tres motivos: el calor, menos turistas y poder disponer de más tiempo libre para ver otras cosas, ya que la visita sin gente es rápida, 1h o poco más.

Llevar agua, gorra y protector solar, pues el sol aquí calienta bastante.

No está de más que os pongáis repelente de mosquitos, tener en cuenta que estaréis en plena selva y los mosquitos en estas zonas no perdonan. No sirve cualquier repelente, debe ser especial para mosquitos tropicales, nosotros nos llevamos Relec, que es el que nos recomendaron y hasta con él puesto, algún picotazo nos dieron y luego tuvimos la roncha 3 semanas.

Tomaros vuestro tiempo, verlo todo con calma, dejar volar la imaginación y hacer muchas fotos.

Subir a la pirámide Acrópolis, porque en ningún otro lugar de la zona podréis hacerlo, más que nada porque en Chichen Itzá está prohibido y en Cobá es más que peligroso subir por lo alto e inclinado de la pirámide, por no hablar del mal estado de la misma.


Espero que os haya gustado el post, y si es así, por fa, dejar un comentario, que no cuesta nada y para una bloguera es importante ;-)).